Definir unos objetivos realistas para tu empresa es lo primero que debes hacer a la hora de solicitar y seguir una consultoria estrategica para la misma.
“Soñar no cuesta nada”, dice un viejo refrán, pero cuando se trata de negocios y metas comerciales, se vale soñar sí, pero solo lo justo, lo que te permita proyectar en un plano realista tus metas o lo que es lo mismo planificar de acorde a objetivos alcanzables en un período determinado de tiempo.
Nadie como tú para saber en qué momento exacto se haya tu compañía, lo cual es el primer paso para redefinir objetivos y ver cual alcanzables pueden ser.
Por ejemplo en materia de producción, si hasta el momento a tu empresa le costaba alcanzar la meta de producción deseada no resulta coherente que te planteas aumentarla al doble o al triple pues está claro que no se alcanzará. Pero tal vez puedes pensar en diversificar la producción, o aumentar las ventas de forma tal que te permitan aumentar la contratación de más empleados. O si lo que tu empresa padece es un problema de marketing puedes trazarte un determinado tiempo donde una nueva campaña relanza tu marca.